La creatividad y la innovación son ejes clave a la hora de diferenciarse en un entorno empresarial competitivo; estos aspectos cada vez cobran más fuerza al interior de las organizaciones y más aún en un escenario globalizado donde las nuevas tendencias priman a la hora de elegir entre un producto o servicio.

“Los desafíos empresariales, tanto estratégicos como operacionales, requieren cada vez más que se piense fuera de la caja para crear soluciones más efectivas. Es necesario que una buena parte de la organización y sus equipos de trabajo se sientan libres de proponer ideas nuevas para optimizar procesos, productos e incluso modelos de negocios”, afirma Roberto Salas, vicepresidente ejecutivo y CEO de Consorcio Nobis. 

En el marco del Día Mundial de la Creatividad y la Innovación, que se celebra el 21 de abril de cada año, el directivo de Nobis explica cómo fomentar la creatividad en el trabajo en prácticos pasos:

·       Brainstorming: A menudo se pueden experimentar bloqueos mentales que dificultan la concentración en algunos proyectos, y por ende tener un rendimiento poco favorable a la hora de trabajar. Por eso, la lluvia de ideas es una herramienta que facilita la creatividad y permite hallar soluciones a los problemas del día a día. Consiste en enlistar todas las ideas posibles y analizarlas con detenimiento. Es mucho mejor si se lo hace en equipo con más colaboradores para identificar la que mejor se adapte a las necesidades de la empresa. 

·       Recolectar data: Se debe recopilar la mayor cantidad de información posible sobre un determinado asunto, proyecto o iniciativa para tomar decisiones acertadas. Si un colaborador aprende a sistematizar los datos y hacerlos rendir, es mucho mejor para la empresa.

·       Motivación: Debe estar dentro de los pilares de las empresas porque incide directamente en la productividad y en el sentido de pertenencia que tienen las personas. Mientras mantenga a sus colaboradores motivados, es posible que obtenga mejores resultados, que se “pongan la camiseta”, y que pongan todas sus capacidades en marcha para rendir al 100%.  

·       Desafiar a los colaboradores: Es importante que los directivos incentiven a sus equipos de trabajo a dar más de sí mismos, a proponer ideas novedosas, a desarrollar nuevos proyectos o planes que tengan cierto nivel de complejidad. No se deben asignar tareas muy sencillas o extremadamente complejas, debe asignarse retos que favorezcan el pensamiento crítico del colaborador.

·       Trabajar en equipo: Un entorno participativo en el que se pueda compartir ideas y aportar nuevos conocimientos es esencial a la hora de trabajar. Se puede interactuar con distintas áreas para generar mejores resultados. Reconocer las buenas prácticas contribuye a que las personas se sientan confiadas y orgullosas.

·       Implementar  programas: Muchas empresas enfocan sus recursos en capacitar a sus colaboradores para ser personas integrales y que puedan innovar en el día a día. Empresas ecuatorianas como Consorcio Nobis han puesto en marcha programas corporativos para potenciar el trabajo y aportar al ámbito de la creatividad e innovación. Es el caso del programa “Agilidad Nobis”, que promueve una transformación cultural para potenciar las capacidades y habilidades del talento humano interno. 

·       Evitar la monotonía: Realizar siempre lo mismo puede impedir el proceso creativo, causar desinterés y aburrimiento en las tareas asignadas. Si es posible, permita algunas variaciones en las tareas asignadas. Escuche a sus trabajadores y no permita que se sientan desalentados o inconformes con sus actividades.