Brindar una mejor experiencia al cliente en el punto de venta es el objetivo de 7-Eleven, la multinacional de tiendas de conveniencia con sede en Estados Unidos, que estrenó recientemente su primera tienda sin cajeros en la ciudad de Irving, en el estado de Texas.

El local utiliza cámaras, algoritmos predictivos, códigos QR y la aplicación móvil de 7-Eleven para que los clientes entren, elijan los productos y salgan de la tienda. Una vez que se van, reciben en sus celulares el detalle de las compras que hicieron y una confirmación de la transacción del pago móvil. El funcionamiento de la tienda es parecido al de Amazon Go, donde los clientes compran sin pasar por la caja.

Por ahora, la tienda es un prototipo, sólo la utilizan los empleados de 7-Eleven, pero la compañía tiene planes de expandir el concepto a nivel nacional.

“Nuestro objetivo es superar las expectativas de los consumidores de transacciones fáciles y rápidas; y ofrecer una experiencia de compra sin problemas”, dijo Mani Suri, Vicepresidente y Director de Informática de la compañía, quien agregó que probar el funcionamiento de la tienda con los propios empleados es “una forma muy productiva de aprender antes de lanzarse a un público más amplio”. Los empleados de 7-Eleven brindan comentarios honestos de su experiencia, lo que permite a la empresa corregir posibles errores y mejorar la tecnología.